Las intensas lluvias caídas durante la última semana provocaron inconvenientes de todo tipo, tanto en lo social como en lo productivo. En la ciudad de Rojas hubo evacuaciones; en las rutas, cortes y accidentes; y en el campo, el anegamiento que viene impidiendo la cosecha, con el riesgo cierto de que si la situación se prolonga habría que empezar a hablar de más perdidas (sumadas a las que ya provocó la sequía).
Miércoles 9 de mayo de 2018.
La situación que vive la producción agropecuaria es bastante particular, porque durante todo el desarrollo de los cultivos hubo una sequía importante que limitó su rendimiento, y ahora, que la cosecha estaba en marcha, las lluvias impiden el acceso a los campos, con lo cual se prevén más pérdidas.
Las lluvias provocaron también inconvenientes en la vecina ciudad, rutas y caminos. Hubo varias familias evacuadas, de los barrios que habitualmente se inundan: Santa Teresa (sector más cercano al río), La Loma, el ex motel Kamao y el asentamiento que está detrás de la pista de la salud.
Por decisión de Defensa Civil y la secretaría de Desarrollo Social rojense, las familias evacuadas fueron alojadas en el CIC de barrio Progreso, a la espera de que mejoren las condiciones climáticas y puedan regresar a sus hogares.
Mientras tanto, distintas entidades han iniciado campañas solidarias para recolectar alimentos no perecederos, ropa de abrigo y otros elementos para socorrer a los evacuados. Entre ellas están las cooperativas del programa "Argentina trabaja".
Las rutas, otro problema, y la 31 es la que está al tope de inconvenientes. El mal estado de la calzada ya es general en todo su trayecto, pero particularmente en el tramo que va desde Rojas hasta la ruta 8, y sobre todo, después de Carabelas.