Miércoles 29 de junio de 2016.
La Cámara de Diputados tratará este jueves la ley de “fomento de inversiones” para Pymes, enviado por el Gobierno en medio de la disputa por la ley antidespidos, que ya tiene acuerdo con el Frente Renovador y el Bloque Justicialista, aunque recién mañana se definirán los cambios.
Uno que aún no acepta Cambiemos es subsidiar las tarifas de las Pymes, un reclamo de Diego Bossio que hoy no fue tomado en cuenta en el plenario de Comisiones, manejado por incansable Luciano Laspina, a cargo de Presupuesto.
El salteño Pablo Kosiner, compañero de Bossio, planteó reducir un 30% las tarifas de luz, gas y agua a las Pymes, al menos por 2 años.
Carlos Heller, aliado kirchnerista, fue más lejos y exigió retrotraerlas a noviembre último.
No será uno de los cambios aceptados por el oficialismo en el plenario de mañana a las 12, cuando buscarán emitir dictamen con el objetivo de tratarlo el jueves junto a la ley de beneficios a los autopartes, que sí tuvo dictamen este mediodía.
El proyecto sobre Pymes se basa en el diferimiento de impuestos más que en beneficios directos. Por ejemplo, propone computar como pago a cuenta de ganancias la totalidad de lo ingresado para el impuesto al cheque.
También se garantiza una estabilidad fiscal entre el 1 de julio y 31 de diciembre de 2018, o sea, no se tocarán impuestos.
Para la oposición, los beneficios son escasos. Kosiner exige además considerar a las Pymes del norte, perjudicadas por el costo del flete.
Y proponen reducir ganancias a las empresas a medida que sumen empleados. El oficialismo, como siempre, debe evaluar el costo fiscal antes de tomar decisiones.
Marco Lavagna, del Frente Renovador, pidió incorporar el Programa de Recuperación Productiva, conocida como Repro, creado por el ministro de Trabajo, Carlos Tomada. Laspina quedó en responder. Hará números toda la noche.