22 noviembre 2024

Sin planes sociales, uno de cada 4 argentinos sería indigente

Así lo indicó la consultora exQuanti en base a datos del Indec. Representa un salto de siete puntos respecto al último trimestre de 2023, cuando la indigencia se ubicó en 17,7%.

En el marco de un escenario complejo por la devaluación, una consultora reveló que 1 de cada 4 argentinos habría caído en situación de indigencia, de no ser por los planes sociales para los sectores más vulnerables.

Así se desprende de los alarmantes datos que incluye el estudio de la consultora especializada exQuanti, basada en los datos oficiales de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del INDEC.

La firma indicó que la indigencia del primer trimestre de 2024 habría alcanzado un preocupante 24,7% si no se hubieran mantenido los planes oficiales de asistencia.

Esto representa un salto de siete puntos porcentuales respecto al cuarto trimestre de 2023 cuando la indigencia, sin considerar los planes, se ubicaba en 17,7%. Además, comparado con el primer trimestre de 2023, subió 11,5 puntos porcentuales, desde un 13,2%.

Los datos del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA) corroboran esta tendencia, y muestran que la indigencia alcanzó el 19,1% en el mismo período.

Sin embargo, con la implementación de los programas de asistencia social, la indigencia oficial se elevó a 20,3% en el primer trimestre de 2024, según datos procesados por exQuanti.

Esta cifra representa un incremento significativo respecto al 14,6% registrado en el último trimestre de 2023 y casi el doble del 8,9% observado un año atrás. No obstante, los indicadores revelan un deterioro profundo, a pesar de los esfuerzos del gobierno por mitigar el impacto de la crisis.

Planes sociales y un impacto reducido
Agustín Salvia, coordinador del Observatorio de la Deuda de la UCA, señalaba que Argentina atravesando un proceso de empobrecimiento en dos niveles: "Vemos clases medias bajas que caen en la pobreza en términos estadísticos y monetarios, principalmente por la pérdida de poder adquisitivo, sin posibilidad de compensar con más trabajo".

En ese momento, Salvia ya advirtió que los programas sociales no eran suficientes para sostener un "piso bajo" de pobreza extrema. En esa línea, los datos de exQuanti subrayan que la efectividad de los planes sociales es limitada, especialmente en lo que respecta a la pobreza.

En el primer trimestre de 2024, la pobreza con planes sociales se situó en 55%, mientras que sin ellos habría sido ligeramente superior, alcanzando el 55,4%. Esto indica que, aunque las transferencias del Estado ayudan a mitigar la pobreza extrema, su impacto en la reducción de la pobreza general es mínimo.

El porcentaje de los ingresos de los hogares pobres provenientes de subsidios y transferencias directas del Estado fue de 7,4% en el primer trimestre de este año, mientras que para los hogares indigentes fue de 17,9%. Estos son los registros más bajos desde 2016, lo que refleja la erosión del poder de compra.

La pobreza y la indigencia han alcanzado niveles alarmantes pese a los esfuerzos del gobierno por mitigar la crisis, la situación se mantiene crítica, pero hay optimismo en cuanto a la eficacia de los planes sociales para mitigar el impacto de la pobreza extrema en aquellos en situación de calle.