Se trata de la “Ley Hojarasca”. Es en el marco de las medidas que impulsa el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, a cargo de Sturzenegger.
El Gobierno nacional envió al Congreso un proyecto, nombrado como la “Ley Hojarasca”, que busca derogar alrededor de 70 leyes que el Ejecutivo considera como “obsoletas”.
La presentación está vinculada al Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, que conduce Federico Sturzenegger, y sostiene que las normativas a derogar “representaron un obstáculo a las libertades y afectaron el derecho a la propiedad, entre otros abusos del Estado”.
Según un gráfico que compartió Sturzenegger en su cuenta de X, la iniciativa busca derogar normativas impuestas por las dictaduras y leyes sancionadas en el periodo democrático. Incluyen leyes de las presidencias de Isabel Perón, Agustín Lanusse, Reynaldo Bignone, Héctor Cámpora, Juan Carlos Onganía, Carlos Menem, Raúl Lastiri, Jorge Rafael Videla y Néstor Kirchner.
En el comunicado dado a conocer este viernes por la cartera de Desregulación y Transformación del Estado, se señaló que “el gobierno del presidente Javier Milei realizó un análisis detallado de las leyes argentinas y encontró 6 motivos para la derogación de diferentes normas”.
Según se informó, las normas a derogar están vinculadas al derecho a la propiedad, a tramites, a cuestiones que quedaron obsoletas por cambios tecnológicos o que fueron mejoradas por leyes posteriores, entre otros temas.
Entre estas cuestiones, se enumeró: leyes que limitan la libertad individual y restringen el derecho de propiedad, que eliminan trámites inútiles y sin sentido, que fueron superadas, actualizadas y mejoradas por otras leyes posteriores, que en la actualidad son obsoletas por los cambios tecnológicos, que dejaron de tener sentido porque definían obligaciones para instituciones que dejaron de existir y que crean organismos con financiamiento público cuando deberían solventarse a sí mismos.
“En definitiva, este proyecto de ley busca lograr un cuerpo jurídico más pequeño, más ordenado y, por ende, más justo y una Argentina con mayor libertad”, indicaron desde el Gobierno.