22 noviembre 2024

Viruela del mono: advertencia de la OMS por el aumento de casos

Científicos informaron sobre la aparición de una nueva cepa, que pareciera causar casos más graves.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó una advertencia por el aumento de casos de viruela símica y subrayó que en los países de África esta enfermedad se está propagando rápidamente.

De igual modo, científicos informaron sobre la aparición de una nueva cepa, que pareciera causar casos más graves y está generando un foco de infección en la República Democrática del Congo. En esa línea, el organismo de la ONU declaró una emergencia de salud pública.

Desde la OMS, Rosamund Lewis, líder técnica de la entidad para la viruela símica, expresó que hay “una necesidad crítica de abordar el reciente aumento de los casos de viruela sísmica en África”. Este año, se reportaron unos 8.600 casos de viruela símica y 410 muertes en el Congo y lo más opreocupante es que los tratamientos y vacunas existentes no llegan a este país.

Un estudio de la universidad de Ruanda precisó que en la provincia congoleña de Kivu del Sur se propaga una cepa mutada de la considerada como endémica. Además, advirtió que es peligrosa y que tiene tasas de letalidad de alrededor del 5% en adultos y del 10% en niños.

La viruela símica es una infección viral que se propaga a través del contacto cercano de persona a persona, causando síntomas similares a los de la gripe, sumando lesiones cutáneas llenas de pus. Si bien la mayoría de los casos son leves, puede llegar a provocar la muerte.

La causa de la enfermedad es el virus de la viruela símica (generalmente abreviado como MPXV). Se trata de un virus con envoltura y ADN bicatenario de la familia Poxviridae, género Orthopoxvirus, al que también pertenecen los virus de la viruela humana, de la viruela vacuna, de la vaccinia y otros. El virus tiene dos clados genéticos: I y II, precisa la OMS.

El MPXV se descubrió en Dinamarca en 1958 en monos destinados a la investigación. El primer caso humano de viruela símica se notificó en la República Democrática del Congo en 1970, en un niño de 9 meses.

La enfermedad puede transmitirse de persona a persona y, ocasionalmente, de animales a personas. La viruela símica tuvo una emergencia paulatina en África Central, Oriental y Occidental tras la erradicación de la viruela en 1980 y el fin de la vacunación antivariólica en todo el mundo.

En 2022-2023 se produjo un brote mundial. Se desconoce el reservorio natural del virus, pero hay varios mamíferos pequeños vulnerables, como ardillas y monos.

Transmisión
La transmisión de persona a persona puede producirse por contacto directo con lesiones infecciosas de la piel o de otras zonas, como la boca o los genitales. El contagio puede producirse:

-Cara a cara (al hablar o respirar);

-Piel con piel (al tocarse o mantener relaciones sexuales vaginales o anales);

-Boca a boca (al besarse);

-Boca con piel (al besar la piel o al tener relaciones sexuales orales);

-Por gotículas respiratorias o aerosoles de corto alcance en caso de contacto cercano prolongado.

A continuación, el virus entra en el organismo a través de la piel lesionada, las mucosas (por ejemplo, oral, faríngea, ocular, genital, anorrectal) o las vías respiratorias. La viruela símica puede contagiarse a otros miembros de la familia y a las parejas sexuales. Las personas con múltiples parejas sexuales corren mayor riesgo.

La transmisión de animales a humanos se produce por mordeduras o arañazos, o al cazar, despellejar, manipular cadáveres, cocinar o comer animales infectados. La magnitud de la circulación del virus en las poblaciones animales no se conoce bien y sigue siendo objeto de estudio.

Se puede contraer la viruela símica a partir de objetos contaminados como ropa de vestir o de cama, a través de heridas punzantes en la asistencia de saluld o en entornos comunitarios como los salones de tatuajes.

Síntomas frecuentes:

-Erupción cutánea;

-Fiebre;

-Dolor de garganta;

-Dolor de cabeza;

-Dolores musculares;

-Dolor de espalda;

-Falta de energía;

-Ganglios linfáticos inflamados.

En algunos casos el primer síntoma es una erupción cutánea, pero otros pueden presentar antes síntomas diferentes. La erupción comienza como una mancha que se convierte en una vesícula llena de líquido y puede picar o doler. A medida que la erupción se cura, las lesiones se secan y se cubren de costras que acaban por caer.

La vacunación contra la viruela símica puede ayudar a prevenir la infección. La vacuna debe administrarse en los 4 días siguientes al contacto con alguien que tenga viruela símica (hasta 14 días después si no hay síntomas).