El cirujano estético Aníbal Lotocki fue procesado por homicidio simple contra Rodolfo Cristian Zárate, quien murió en 2021 tras una lipoescultura y dermolipectomía.
El cirujano estético Aníbal Lotocki fue procesado por homicidio simple contra Rodolfo Cristian Zárate, quien había sido intervenido en 2021 por una lipoescultura y dermolipectomía. La víctima había fallecido el 16 de abril de aquel año, un día después de la operación.
En la resolución, el juez Luis Schelgel del juzgado nacional Criminal y Correccional N° 60 señaló que procesará al esteticista sin prisión preventiva y le ampliará un embargo por 4.804.700 pesos.
De acuerdo al magistrado, la víctima había sido operada en el Centro Médico Conde (CEMECO), ubicado en el barrio porteño de Caballito. Si bien se le habían realizado análisis prequirúrgicos, desde el juzgado le reprocharon al médico que “debería haber ordenado estudios complementarios” ya que Zárate era tabaquista, diabético y había tenido COVID-19.
La intervención se llevó a cabo por la mañana del jueves 15 de abril de 2021, y duró entre cuatro y cinco horas. Pero luego el hombre “fue subido una vez más al quirófano” por otras dos horas más, aunque “no existen registros de lo acontecido”, “dado que nada se consignó en la historia clínica”.
Finalmente, pasada las 20 de ese mismo día, “Aníbal Lotocki se retiró del centro médico pasadas las 20 y dejó a Zárate abandonado a su suerte, a sabiendas que estaba dolorido y que hubiera sido necesario trasladarlo en ese preciso momento a un centro de mayor complejidad, para que atraviese su postoperatorio que requería de internación”.
Por otro lado, la resolución cuestionó que el cirujano “puso en peligro la vida de Zárate, quien pasó una noche signada por dolores. No cenó ni durmió y, cómo le molestaba la sonda vesical, la enfermera se la tuvo que quitar y darle un papagayo”.
Durante la noche, la enfermera Jésica Soledad Valdez notó que no estaba saturando. El equipo médico de Lotocki, conformado por Forcacio (anestesiólogo), Bianchi (médica ayudante) y Kreczek (instrumentadora), le practicaron maniobras de reanimación, y luego le hicieron una transfusión con sangre que estaba reservada para otra paciente.
Si bien después llegó una ambulancia para trasladarlo al Hospital Durand, la víctima ya había fallecido “dentro del centro médico”.