Sucedió en Villa Gesell. La mujer fue trasladada al hospital por sus vecinos, mientras que el niño le dijo a la Policía que en el medio de una discusión su papá sacó un revólver y efectuó varios disparos hacia su mamá.
Un remisero de la ciudad balnearia de Villa Gesell le disparó en la cara a su pareja delante de su hijo de 11 años, y por el hecho, permanecía prófugo acusado de tentativa de femicidio.
La víctima, identificada como Claudia Noemí Aguirre, de 37 años, se encuentra internada en estado reservado en el hospital de Villa Gesell luego de haber recibido disparos de arma de fuego en el rostro y el cuello, mientras que su pareja, el imputado Sergio Rojas, de 43 años, aún no había sido localizado.
La Policía arribó al lugar de los hechos, Paseo 125 y Av. Circunvalación de Villa Gesell, pasada la medianoche del domingo, tras un llamado a la línea de emergencias 911. Al arribar el móvil, los agentes se entrevistaron con un vecino que relató que había escuchado una discusión y las detonaciones de un arma de fuego.
Aguirre fue trasladada al hospital por sus propios vecinos, mientas que los efectivos se entrevistaron con el hijo de 11 años de la víctima y del ahora prófugo imputado, quien les dijo que, en el medio de una discusión, su papá sacó un revólver y efectuó varios disparos hacia su mamá.
Los testigos señalaron que Rojas huyó del lugar en su automóvil, un Chevrolet Prisma plateado y patente AC368DY, que usa como remís. Durante la madrugada, el coche fue detectado con rumbo al acceso sur de Villa Gesell y tomó por la Ruta 11 en dirección al sur, hacia la localidad de Mar Chiquita.
Así se inició una persecución con móviles policiales y de la Guardia Urbana con personal de Secretaría de Seguridad del municipio pero, tras una serie de maniobras evasivas, el sospechoso abandonó el auto en el kilómetro 477, en el margen oeste de la Ruta 11, y, pese a que se montó un operativo de rastrillaje en la zona, no pudo ser localizado y escapó.
En la causa, caratulada como “tentativa de femicidio”, intervino inicialmente el fiscal de general Madariaga Walter Mércuri, pero ya quedó en manos de su colega de Villa Gesell Verónica Zamboni.
Los investigadores tienen dos hipótesis sobre el paradero de Rojas: que haya escapado en otro vehículo con ayuda de alguien o que se haya suicidado en el medio de algún campo, ya que continuaba con el arma en su poder y llamó a un familiar para anunciar que se iba a matar.
