Así lo reveló un informe del Observatorio de Argentinos por la Educación. La encuesta determinó que solo 1 de cada 10 estudiantes comprende completamente lo que lee.
A los problemas económicos que debe hacer frente el Gobierno Nacional ─entre ellos los altos niveles de pobreza y una inflación progresiva─ se suma un complejo contexto en materia educativa.
Según un informe publicado por el Observatorio de Argentinos por la Educación, con autoría de Guillermina Tiramonti (FLACSO), Eugenia Orlicki y Martín Nistal (Observatorio), 6 de cada 10 alumnos finalizan sus estudios primarios sin comprender lo que leen.
El relevamiento se lleva a cabo a partir de un análisis de los resultados a los que arriba el Estudio Regional Comparativo y Explicativo (ERCE), sobre los niños que cursan el tercer grado de Argentina. Se comparan con un total de 16 países latinoamericanos y por nivel socioeconómico.
La encuesta determinó que en la Argentina solo 1 de cada 10 alumnos (14%) comprende completamente lo que lee. Para la región, el promedio es 2 de cada 10 alumnos (21%). Asimismo, en Brasil (30%) y en Perú (30,8%), 3 de cada 10 alumnos alcanzan el nivel más alto.
“Los resultados de lectura en tercer grado nos ilustran sobre las dificultades de todos los países de la región para incorporar a toda su población en la cultura letrada. Incluir en este aprendizaje es una tarea que requiere un compromiso fuerte de quienes gobiernan. En América Latina este esfuerzo es mayor porque en muchos casos se están sumando chicos provenientes de poblaciones poco educadas, muy ajenas a la cultura escolar”, señala Guillermina Tiramonti, coautora del informe.
Respecto al rendimiento de Argentina, la especialista advirtió: “Es notable que un país como el nuestro, que se construyó como sociedad moderna a partir de su oferta educativa, descrea hoy del valor de este factor y relegue al analfabetismo a parte de su población”.
Por su parte, Graciela Zenas, referente barrial y especialista en economía popular, aseguró que “los datos de nuestro país son preocupantes y, especialmente, cómo esto se profundiza en los sectores más vulnerados. Además, sucede que muchas madres y padres no tienen las herramientas para apoyarlos con las tareas”.
En ese sentido, sumó: “Es necesario atender y poner como prioridad en la agenda este tema, y desarrollar políticas que permitan garantizar una mejor educación haciendo foco en quienes sufren las mayores desigualdades”.
Para Irene Kit, presidenta de la Asociación Civil Educación para todos, “resulta esperanzador analizar la situación de países de la región que, con menor o semejante rango de PBI, alcanzan iguales o mejores resultados. Brasil, un país enorme, variado y de organización federal como la Argentina, ha logrado una mejora sustantiva”.