El líder de Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) comenzó este viernes a ser atendido por un terapeuta, ante la desolación y el desampara. Esta vez, afuera de la Unidad 14 nadie lo espera para ofrecer su aliento y apoyo.
Este jueves, la Corte de Apelaciones de Valdivia aceptó la extradición de Jones Huala. Unos días después de su detención en la localidad rionegrina de El Bolsón, la Justicia de Chile otorgó el pedido de extradición para el líder de Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), quien se encontraba prófugo desde hace casi un año. De este modo, ya se puso en marcha el operativo policial para el traslado del detenido, y que así cumpla con la condena a nueve años de cárcel en el país trasandino.
La medida fue aprobada por el titular del Juzgado de Letras y Garantía de Río Bueno, Claudio Thomas, que dio a conocer la detención del líder mapuche a la justicia chilena, y le concedió el pedido de prisión preventiva para Jones Huala, en su calidad de prófugo.
El referente patagónico fue arrestado el pasado lunes, en una vivienda de la localidad rionegrina de El Bolsón, en donde permanecía oculto, ya que pesaba sobre él un pedido de búsqueda por parte del Poder Judicial chileno, desde el 11 de febrero de 2022, cuando había dejado de presentarse ante los tribunales de ese país.
Por el momento, Jones Huala permanece detenido en la comisaría 36 de Dina Huapi, cerca de Bariloche, a donde fue llevado tras su arresto, en completo estado de ebriedad y vestido de mujer.
Ya la primera vez que Jones Huala estuvo detenido en la Unidad 14 de Esquel en 2017, un grupo de seguidores que variaba entre 5 y 20 dependiendo de los ánimos y el día de la semana, se reunía en la vereda del centro penitenciario para “hacerle el aguante”.
No estaba claro quién pagaba las pizzas y hamburguesas que sus compañeros de tropelías cenaban cada jornada. Las compraban en un restaurante del centro de Esquel y no en una pizzería cualquiera.
También es cierto que Jones Huala concitaba por entonces la admiración de diversos grupos en el país e incluso en el extranjero.
Pero esta vez, en su regreso al centro penitenciario, afuera de la Unidad 14 nadie lo espera. No hay jóvenes entusiastas reclamando por su libertad. En parte por eso solicitó a sus abogados que lo atendiera un terapeuta a partir de este viernes 10 de febrero.