Desde 1991 quedó ratificado el 1 de Febrero como un homenaje a los trabajadores del sector.
En el texto de la Convención Colectiva de Trabajo N° 8/75.- Vitivinícolas, Obreros y Empleados, celebrado en Buenos Aires el 27 de junio de 1975 así se dispuso.
En su Capítulo XI Art. 32° dice “Día del Trabajador Vitivinícola y Afines: Habiendo fijado la parte obrera el 1° de febrero como Día del Trabajador Vitivinícola y Afines, se declara feriado para todo el personal de la República incluido en los alcances del presente convenio. La parte patronal se aviene a incorporarlo con el carácter de feriado y se obliga a pagar a su personal los jornales y sueldos correspondientes al mismo, aun cuando coincidiera con Domingo, Feriado Nacional, Religioso o Vacaciones”.
Pero más allá de las disposiciones legales queremos hacer un alto en la tarea con los trabajadores vitivinícolas para recordar que el vino lo hacen manos, muchas veces anónimas, a las que los consumidores debemos estar agradecidos.
Feliz Día del Trabajador Vitivinícola entonces y brindemos con un buen vino que se lo merecen.