La comunidad de 9 de Julio en su conjunto, sin distinciones políticas, recuerda hoy el segundo aniversario de la pérdida de quien fuera Intendente Municipal de nuestro distrito por espacio de una década, Walter Battistella, quien falleció en las primeras horas de la tarde del 8 de octubre de 2020, víctima de Covid-19.
Walter Battistella había nacido el 9 de abril de 1958 en la localidad de Facundo Quiroga, en el seno de una típica familia del medio rural, y desde pequeño forjó una fuerte personalidad, mostrando sus dotes de emprendedor y superando distintos desafíos personales y familiares, abrazó desde muy joven su vocación por la medicina generalista, especialidad muy arraigada a sus orígenes, un pequeño pueblo del interior bonaerense.
En 1989, y después de haber iniciado en sus tiempos universitarios su militancia en las filas de la Unión Cívica Radical, se graduó como médico y eligió realizar su residencia en la provincia de Neuquén por espacio de dos años, decidiendo retornar a su querido Quiroga natal, donde siguió abrazando la causa Yrigoyenista y participando de instituciones comunitarias y vecinales.
Esta acción comunitaria, su carisma, perseverancia y sello de hombre bonachón, humilde, sencillo y con un perfil muy humanitario fueron trazando poco a poco su carrera política, que fue tan ascendente como prolífica.
En 1997 fue electo concejal por la UCR, siendo muy recordado su accionar como edil del centenario partido, al ser un férreo opositor al peronismo, preocupándose especialmente por aquellos tiempos por problemáticas tales como la salud y la seguridad, temas que generaban largos y arduos debates en las sesiones del deliberativo de aquellos años.
Con esta plataforma ejerció su mandato hasta el año 2001, circunstancias en las que su compromiso político lo puso al frente del Comité local de la UCR, encarando un proceso de reconversión total del partido, "cuando era muy difícil ser radical y cuando quedábamos muy pocos en el local de la calle Tucumán", como solía recordar siempre en cada charla política, rememorando aquellos difíciles años para los militantes del partido de Alem, junto a quien fuera su gran socio político por aquel momento, el ex diputado provincial Jorge Silvestre.
Luego de otros cargos partidarios, ganó la interna de su partido y llegó a ser Intendente Municipal de 9 de Julio por primera vez en el año 2005, luego de una anticipada convocatoria a elecciones en nuestro distrito, tras registrarse el trágico deceso de quien era por ese momento el jefe comunal de 9 de Julio, Martín Callegaro (PJ).
De esta manera, Battistella, completó el mandato de Callegaro hasta 2007, luego fue releccto por otro período de cuatro años (2007/2011) y nuevamente en 2011 por otros cuatro años más (2011/2015).
Finalmente, ese año, y con la instrumentación de las elecciones Primarias (PASO), e integrada la UCR a las filas de Cambiemos, debió confrontar en internas con el actual Intendente Municipal, Mariano Barroso, ante quien perdió por muy escaso margen, de no más de 300 votos.
Lejos de claudicar en su carrera política, con diferencias, permaneció en este espacio político, pero marcando diferencias con la conducción de su partido y de la coalición, las que lo llevaron a desprenderse de la misma y presentarse en las últimas elecciones con la fuerza de Consenso Federal, teniendo como referente nacional a Roberto Lavagna, cosechando un caudal de votos muy lejano al de otros tiempos, el que ni siquiera le permitió ingresar un edil al HCD.
Tras esa instancia, y según el mismo había asegurado, su carrera política había culminado, por lo que decidió dedicarse nuevamente de lleno a la medicina, donde esta pandemia lo sorprendió y le terminó llevando la vida.
Walter Battistella fue un verdadero caudillo, ya que desde su Quiroga natal supo construir primero un Comité Radical fuerte y combativo, y luego un proyecto político importante y con metas muy claras, de firme oposición al peronismo primero y al kirchnerismo después.
Encontrando como socio político primeramente a Jorge Silvestre e integrando a esta mesa chica luego a Julio Fernández Cortés, supo sostenerse y gobernar con viento en contra, y diferentes signos políticos en Nación y Provincia.
No le fue sencillo, pero con todo su empeño y dedicación, sumados a sus firmes convicciones, supo llevar las riendas del distrito de una manera que le valió el reconocimiento de la ciudadanía, ya que siempre estuvo a su lado sin claudicar en sus pensamientos cueste lo que cueste, siendo el mejor ejemplo de ello el apoyo manifiesto al sector agropecuario, oponiéndose al Gobierno Nacional, al debatirse aquella recodada Resolución 125 y el aumento de las retenciones.
Walter Battistella fue un hombre de pueblo, con todo lo que ello significa. Con un minuto para cada vecino, fuera quien fuera, y en cualquier lugar: el supermercado del barrio, su despacho o el despacho de un Ministerio.
Nunca hizo distinción con nadie y su aire campechano y su carisma eran capaces de seducir con sus ideales políticos a muchos adeptos, tal lo demuestran los contundente números obtenidos en las urnas.
Humano, servicial, atento y siempre dispuesto a ayudar al prójimo, marcó una época de la política de 9 de Julio, con corbata cuando correspondía, pero siempre con sus franciscanas, lo que más allá de haber sido por una cuestión de salud, marcaba también su personalidad.