Un informe del Servicio Penitenciario expuso que la joven acusada por el ataque a la vicepresidenta apareció lastimada en la cárcel.
Brenda Uliarte, procesada como coautora del atentado a Cristina Fernández de Kirchner, se encuentra en prisión desde el 5 de septiembre. La joven fue quien compró el arma con la que su novio gatilló a la vicepresidenta. Debido a un conjunto de mensajes previos y posteriores al hecho, se le atribuye un rol fundamental en el armado del plan de asesinato.
Poco antes de cumplirse una semana de estar encarcelada, un informe del Servicio Penitenciario Federal evidenció que la acusada presentaba signos de haberse lastimado a sí misma. La información proviene de las evaluaciones iniciales para su ingreso al Complejo 4 del Penal de Ezeiza. A su vez, diversos especialistas recalcaron que la joven ‘hizo referencia a que se quería matar’.
A partir del informe, Gustavo Kollman, su defensor oficial, le realizó una entrevista y Brenda negó haber querido quitarse la vida. Con respecto a las lastimaduras en su cuerpo, explicó que se trataban de picaduras de arañas. Si bien sus declaraciones indicarían que no se encuentra bajo peligro, la jueza a cargo del caso, María Eugenia Capuchetti, solicitó que se le brindara atención psicológica.
Uliarte, de 23 años, declaró estar interesada en terminar el secundario para poder estudiar Medicina. Todavía no hizo ninguna referencia a su pareja ni a los hechos por los cuales fue procesada. Aunque sí mostró curiosidad por su amiga, Agustina Díaz, que se encuentra el el Complejo 31 del penal federal.
Tras la preocupación por su salud mental, la defensoría oficial requirió, además de lo solicitado por Capuchetti, realizar un seguimiento terapéutico de su estado psicológico.
