Si bien el nivel es similar al de antes de la pandemia, el Intendente local, Manuel Passaglia, había estimado el arribo de 250 mil feligreses, por lo que la cifra superó las expectativas.
La procesión a la Virgen del Rosario de San Nicolás convocó a una multitud, de niveles similares a los de hace tres años. La celebración se mezcló con el fútbol, ya que decenas de miles de hinchas de Belgrano de Córdoba arribaron a la ciudad para enfrentar a Brown de Adrogué, en un cotejo clave donde consiguió el ascenso a la Primera División del fútbol argentino.
La Iglesia estimó que hubo unas 400 mil personas en la procesión a la Virgen. A ellos se les sumaron 22 mil hinchas de Belgrano de Córdoba, que compartieron tramos de la caminata con los fieles. Algunos, incluso, fueron a ver a la Virgen.
"Se mantuvo el caudal prepandemia pese al deterioro económico que hace que a la gente le cueste más viajar", indicaron desde la organización.
El año pasado, la festividad de la Virgen de San Nicolás había marcado la vuelta de las manifestaciones masivas de fe, aun con distanciamiento social y cuidados sanitarios. Este año, la apertura fue total con imágenes similares a los de antes de la pandemia.