El presidente del bloque del FdT en la Cámara baja bonaerense, César Valicenti, hizo un llamado al Gobierno nacional.
La Legislatura bonaerense, a través de una postura unificada de todos los bloques, condenó la semana pasada el atentado sufrido por Cristina de Kirchner el pasado primero de septiembre en las inmediaciones de su casa en Recoleta.
Se trató, de hecho, de un repudio más cabal a lo sucedido en el Congreso donde el PRO se cortó solo y tras suscribir al texto general los legisladores amarillos abandonar sus lugares ante la atónita mirada de sus socios políticos.
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Sin embargo, la Legislatura dejó algunos detalles que desde la oposición no quisieron dejar pasar. Es que, tal como manifestó en su alocución del pasado lunes, el presidente del bloque del FdT en la Cámara baja bonaerense, César Valicenti, hizo un llamado al Gobierno nacional.
“Lo que planteamos es que, después de este hecho que marcó un antes y un después y de todo el caldo de cultivo que generan conductas de violencia política es necesario armar un nuevo pacto democrático que tiene que tener en cuenta cuáles son los factores que influyen en la inducción a conductas de odio”, dejó en claro Valicenti, de La Cámpora.
Al respecto, la diputada bonaerense del radicalismo, Alejandra Lordén, le dijo a este medio que “el kirchnerismo, en estas cuestiones, es predecible. Detrás de la idea del conglomerado del odio, en el que ponen arbitraria e injustificadamente a la justicia, los medios y la oposición, está el proyecto recurrente de restringir las voces que no acuerdan con ellos”.
Y agregó: “Ya no tienen el poder político ni simbólico para imponer estas cosas. Lo único que logran es quedar en evidencia frente a una sociedad que pide moderación y merece, sobre todas las cosas, que la dirigencia se ocupe de mejorar su calidad de vida”.
En la misma línea, su par Emiliano Balbín aseguró que al Gobierno nacional se le cayó la careta. Está claro que la agenda la marca el kirchnerismo y no cambiaron nada desde el 2015 hasta acá. Lo único que buscan es desligar a Cristina de las causas judiciales, y avanzar sobre las libertades individuales”.
Y remarcó: “Dijeron que volvían mejores, pero volvieron iguales, y queriendo avanzar sobre temas que no pudieron en los doce años de gobierno k. El ejemplo es la Ley de Medios, y un nuevo intento por limitar la libertad de expresión. Se sienten acorralados, y buscan callar las voces independientes por un lado, y desconocer las instituciones de la república por el otro, como es la Justicia”.
Por su parte, el también radical Lorenzo Nátali sostuvo que “más allá del debate sobre una nueva Ley de Medios o las modificaciones que quieran hacerle a la que actualmente está vigente, la sociedad nos pide a los políticos que acerquemos posiciones y busquemos el diálogo para solucionar sus problemas”.
Cabe recordar que el pasado lunes, la legisladora Susana González (FdT) había manifestado que “la falsa libertad de prensa debe ser regulada y los discursos de odio limitados”. Y apuntó hacia arriba: “Mal que le pese a mi Presidente, llegó el momento de fijarse qué hacemos con el pago de la pauta publicitaria. ¿Vamos a seguir pagando mensajes de odio y fake news? ¿Vamos a seguir sin regular la ley de medios?”.
Desde la Coalición Cívica, el diputado Luciano Bugallo fue al hueso dijo que “el kirchnerismo, en su ADN, tiene un gen que es autoritario. Les molesta la libertad de expresión. Por eso son reaccionarios con lo que no pueden controlar por fuera del relato. Por eso el que piensa distinto es el enemigo a combatir. Cuando estos regímenes llegan al poder lo primero que hacen es transformar y reformar instituciones. Esto ya se aplicó en Cuba y Venezuela. Es un copiar y pegar”.