Viajar es uno de los placeres de la vida, pero estos dos jóvenes sanclementinos lo harán de una forma muy particular: en dos ruedas. “Viajamos por amor al mundo, por curiosidad de saber todo lo que hay, transmitir alegría en cada lugar, y aprender de cada situación que se presenta”, expresaron.
Pero ¿Cómo surgió la idea? Mariano y Maricel tienen una creencia, y es que el tiempo “es invaluable” por eso deciden invertirlo en viajar. Además, buscan estar “en un lugar con calor y ya no pasar frío, y así mejorar nuestra salud”.
En otras oportunidades, ambos han viajado de mochilero, realizaron voluntariados y trueques, “pero en bici, en pareja y tan lejos, es la primera vez”, afirmaron.
Para lograr esta travesía se entrenaron durante muhco tiempo: Entrenaron karate, funcional y mejoraron su alimentación. “Decidimos tomarnos tres meses, para planear a qué lugares queríamos ir y porque, ver las rutas que tomaríamos y aprender sobre las bicis ya que no éramos ciclistas” detallaron.
Y es que por día pedalean unos 40 km, aunque si están con energía, un poco más. Eso sí, cada dos o tres días hacen una parada para trabajar, descansar y reorganizarse.
Por ejemplo, el primer día pedalearon 80 km "sin sentir un desgaste excesivo, ya que en bici no teníamos tanto entrenamiento". Al otro día continuaron 50 km y con viento en contra.
"Reafirmamos que lo más importante es la fuerza de voluntad. Descubrimos la belleza de pueblos cercanos al nuestro que nunca nos habíamos detenido a hacerlo, gracias a la bici. Y nos emocionó mucho el cariño que recibimos de personas que no nos conocían y que ofrecían darnos una mano sin ni siquiera pedírselo", celebraron.
A lo largo de su viaje acamparán y se alojarán en lugares económicos o campings. También apuestan a la gente viajera que ofrece hospedaje “de buena onda”.
A México calculan llegar en 10 meses, “aunque Vamos sin límite, sintiendo en cada lugar donde llegamos, cuánto tiempo quedarnos”, expresaron.
En Ecuador ya tienen planeado quedarse unos meses trabajando y ahorrando.
“A lo largo del viaje vamos a estudiar Tantra y el poder del cacao, donde sea que se presente, y en Costa Rica, aprender Breathwork, que es una técnica de sanación con la respiración”, señalaron.