El pasado domingo se volvió a vivir un hecho de violencia en el fútbol ya que en la cancha de El Agrario de Urdampilleta, se registró una nueva agresión a un árbitro en el cotejo de Segunda División entre el local y Vallimanca.
Los encuentros entre Agrario y Vallimanca por la primera ronda del Fútbol Rural de Bolívar fueron suspendidos a raíz de un nuevo hecho de violencia a un representante de la Agrupación de Árbitros de Olavarría.
Recordemos que hace menos de un mes el juez de un partido disputado en Urdampilleta fue atacado por un jugador y permaneció una hora inconsciente tras un cabezazo recibido.
El árbitro principal de Segunda División, Rodrigo Albarracín, sufrió una agresión de parte del arquero del club urdampilletense en la jornada del pasado domingo.
El partido correspondiente a la novena y última fecha de la primera ronda se suspendió a los 21 minutos del segundo tiempo. Hasta ese momento, el resultado parcial era un empate en 1. En tanto, el incidente hizo que el encuentro de Primera División no se dispute.
La agresión ocurrió tras la corrección del colegiado al arquero a la hora de ejecutar un tiro libre (Albarracín cobró falta dentro del área y el golero la ejecutó afuera de la misma, por lo que el colegiado lo exhortó a volver a hacerlo dentro de los límites del área). Inmediatamente el jugador discutió con el árbitro y seguido lo insultó, lo que generó la expulsión inmediata de Bazán. Tras la roja, el arquero le propinó un golpe en la zona de la caja torácica a Albarracín. Tras el lógico tumulto y la salida de Bazán del terreno de juego se reanudaron las acciones. A los 22 minutos el colegiado comenzó a sentir molestias en su pecho, lo que originó la suspensión del partido.
Albarracín fue atendido por una enfermera en el lugar y tras cotejar que no tenía nada serio se trasladó a la terminal de ómnibus de Bolívar para emprender su viaje a Olavarría.
Fuente: La Mañana de Bolívar
