Tildó de “inconsistente” y “anacrónica” la postura del Gobernador bonaerense, luego de que este incitara a los alumnos a “rebelarse” contra España en un acto por el Día de la Bandera.
La disputa por la implementación del lenguaje inclusivo entre los alumnos argentinos, llegó a la grieta política, tal es así que luego de la decisión del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires de sancionar su utilización en las aulas, muchos dirigentes opositores salieron a defender el nuevo método del habla.
Uno de los que se sumó a la movida pro lenguaje inclusivo, fue el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, quien aprovechó el acto de jura de lealtad a la Bandera, para tirarle un palito a Horacio Rodríguez Larreta, llamando a los alumnos de primaria a “rebelarse” contra España, al afirmar: “No nos van a explicar las palabras que usamos”.
Pero la Real Academia Española (RAE) recogió el guante y salió a cuestionar la postura del dirigente camporista, así el filólogo y exdirector de la institución cultural, Darío Villanueva Prieto consideró “inconsistente” y “anacrónica” la postura del economista y manifestó especial preocupación por el contexto en que la expresó.
“Me parece una declaración inconsistente y por otra parte anacrónica, porque el español es la lengua que hoy es no por la colonia, sino por la independencia. Cuando se producen las independencias a partir de 1810, los lingüistas han acreditado que en América sólo había un 20% de ciudadanos que hablasen español, de manera que las repúblicas fueron las que tomaron la decisión de que la lengua oficial de la naciente institución republicana, que era la Nación, tenía que ser esta lengua”, explicó el académico.
En referencia al contexto en el que el gobernante profirió dichos comentarios, Villanueva Prieto sostuvo “lamento mucho ese tipo de declaraciones por parte de una persona que tiene una gran responsabilidad política y sobre todo hablando con jóvenes”.
Con una trayectoria de casi 50 años, como profesor universitario, consideró que transmitir “moneda falsa” a los alumnos es “problemático”. Sin embargo, celebró que “los jóvenes tienen su cerebro abierto, muy fértil y muy fecundo, y tienen su propio criterio”.