Los incrementos se ubican en el orden del 30% al 50% interanual. Para la temporada completa, (enero y febrero), está entre $ 100.000 y $ 120.000, dependiendo de la zona y del balneario.
La temporada de verano 2022 se acerca y los precios para los turistas interesados en pasar sus vacaciones en las playas de la Costa Atlántica empiezan a tomar forma. El próximo fin de semana largo, que será en octubre, será el mejor termómetro. Y las previsiones en los actores del sector turístico y en las administraciones municipales son muy optimistas.
“Para el fin de semana largo de octubre los indicadores de reservas están en el 80%”, aseveró Luis Sanza, agente de viajes y presidente de la Asociación de Concesionarios de Playa de Pinamar, en declaraciones realizadas a Telpin TV.
En relación a la temporada 2022, Sanza indicó que “hay una inmensa cantidad de consultas de jóvenes de entre 17 y 23 años. Creo que es un efecto rebote de lo que pasó el año pasado, cuando estuvieron todos guardados”. Y lo diferenció del “público adulto mayor que viene con chicos menores y es habitué, y que quizás no está en un tren de consumo de salida tan activa”.
Respecto de los precios para el verano, el operador turístico pinamarense sostuvo que “hay un mercado muy atomizado y una gran cantidad de oferentes con distintas políticas. Los precios han tenido un piso de incremento del 25% ó 30% interanual. Y puede llegar a haber algunas propuestas, como Pinamar Norte y Cariló, que estén en el orden del 50% o quizás hasta un poquito más”.
En el servicio de playa las subas son similares, ya que van del 30% al 50% interanual. Por caso, Sanza especificó que el alquiler de una carpa durante todo el mes de enero “está en el orden de los $ 81.000 y la temporada, que es enero y febrero, está entre $ 100.000 y $ 120.000, dependiendo de la zona y del balneario. En Cariló no tengo valores actualizados porque hay algunos concesionarios que están viendo qué es lo que pasa, porque no quieren no fijar un precio y después quedar desfasado”.
