Los tres ejemplares fueron encontrados por un guardafauna luego de que un vecino denunciara la muerte de sus perros por haber comido vísceras contaminadas en la zona.
Tres cóndores andinos fueron hallados sin vida por integrantes del Cuerpo de Guardafaunas de Regional Norte entre Huinganco y Butalón Norte luego de que un habitante de la zona denunciara la muerte de sus perros por haber comido vísceras contaminadas con agroquímicos.
Áreas Naturales Protegidas de la provincia intervino para estudiar a los ejemplares, identificar qué tipo de agroquímico se utilizó, dar con los responsables y y medir el impacto ambiental de los agrotóxicos. "Con los cebos tóxicos no solo se pone en riesgo a los cóndores, que es una especie protegida, sino a la diversidad en su conjunto porque no sabemos por cuánto tiempo perduran en el suelo, en el aire y el agua", explicó Lucía Redondo, directora provincial de Áreas Naturales Protegidas (ANP) y Recursos Faunísticos y continuó: "El perjuicio que causa sobre distintas especies es inconmensurable".
Lo cierto es que el consumo de cebos tóxicos (ganado envenenado) es la principal amenaza de estos ejemplares en la estepa patagónica: "Septiembre y octubre es época de parición de los chivos, una actividad de crianceros en el norte neuquino, quienes para 'proteger' a las crías, que son más susceptibles al ataque de pumas y zorros, han decidido utilizar un método de envenenamiento con cebo tóxico para evitar que fueran atacadas, colocando el cebo en las vísceras de un chivo y enterrándolo", señaló a Télam la mujer.
Sobre los responsables del hecho, Redondo aseguró que "se tiene identificado el lugar y se presume el autor, pero es materia de investigación", y agregó que está interviniendo la Fiscalía de Chos Malal, Fauna, Policía y que se evalúa la intervención de Gendarmería.
Para determinar los efectos sobre el medioambiente, Redondo contó que tomaron muestras de uno de los cóndores y se enviaron a analizar a un laboratorio privado de Buenos Aires a través de la organización proteccionista Bioandina "para determinar el tipo de agroquímico". Los resultados estarán disponibles en 15 días aproximadamente.
"Una vez que estén dadas ciertas condiciones jurídicas vamos a tomar muestras de suelo también, porque los agroquímicos tienen una actividad residual por bastante tiempo, lo cual puede contaminar el suelo", completó.
Por su parte, Rayen Estrada Pacheco, bióloga becaria del Conicet y referente de Bioandina, detalló a Télam que desde la organización se promueve la trazabilidad de los productos sulfurados para conocer quién y para qué se compran los agro tóxicos. Presentaron un proyecto de Ley de trazabilidad de agrotóxicos que tiene media sanción, "pero está parada hace dos años", concluyó la bióloga.