22 noviembre 2024

Cómo será el regreso a la presencialidad en escuelas, oficinas y canchas

El Gobierno nacional avanzará en flexibilizaciones apoyado en el avance del plan de vacunación y las 13 semanas de baja de casos Covid.

El Gobierno nacional apalancado en los avances registrados del plan de vacunación y el descenso sostenido de casos Covid desde hace 13 semanas prepara, a partir del próximo miércoles 1 de setiembre, el regreso de los empleados públicos a sus puestos de trabajo, ampliar la presencialidad en las escuelas y hacer una prueba, aunque aún acotada, de la vuelta de los hinchas a los partidos de fútbol.

En Casa Rosada, explicaron que los avances en el plan de inmunización y otras políticas públicas posibilitan este retorno de las actividades de manera "responsable y cuidadosa", luego de una semana en la que el país alcanzó 50.568.620 vacunas recibidas desde el inicio del operativo de vacunación.
Según las cifras oficiales que se desprenden del Monitor Público de Vacunación del Ministerio de Salud nacional, un total de 46.821.494 de dosis fueron distribuidas en todo el país y 41.408.689 ya aplicadas, de las cuales 27.703.975 corresponden a primeras dosis y 13.704.714 a segundas.

 

Cómo será el regreso a la presencialidad de los trabajadores estatales

A partir del miércoles unos 200 mil empleados estatales serán convocados a retomar el trabajo presencial, en las distintas reparticiones ministeriales y de organismos descentralizados de la administración pública, de los cuales un 60 por ciento estaban realizando trabajo remoto, número que ya había descendido al 40 por ciento para fines de agosto.

Según la resolución 91/2021 de la Jefatura de Gabinete, podrán ser citados quienes hayan recibido una dosis de cualquiera de las vacunas, desde 14 días después de recibirla, independientemente de la edad y la condición de riesgo, pero quedarán excluidas las embarazadas, las personas con inmunodeficiencias y los pacientes oncológicos y trasplantados.

"Se trata de una presencialidad programada, que arranca el 1 de septiembre, y que implica cumplir con protocolos establecidos de seguridad y de cuidado, con una relación de metros cuadrados por persona, con armado de burbujas en muchos sitios en donde la dotación nunca va a estar a pleno", explicó días atrás la secretaria de Gestión y Empleo Público de la jefatura de Gabinete, Ana Castellani.

El sector público nacional en su conjunto tiene unos 900.000 empleados, que incluye a las fuerzas armadas y de seguridad, aunque ese personal siempre estuvo en la presencialidad.

La concurrencia y el trabajo remoto se alternará semanalmente, en función de los días que defina cada autoridad en cada repartición, y se prevé un límite, ya que las tareas a distancia no podrán ser superiores al 50% de la jornada habitual dispuesta o hasta 20 horas semanales.

En cuanto a aquellos trabajadores que no quieran vacunarse, ya que la inmunización no es obligatoria, deberán firmar una declaración jurada, y trabajarán en lugares determinados de los edificios para evitar que generen un mayor riesgo de contagio para el resto. Fuentes oficiales estiman que estos empleados alcanzan una proporción "muy menor" de la plantilla.

En la provincia de Buenos Aires, donde más de 5 millones de bonaerenses ya cuentan con las dos dosis, el gobernador Axel Kicillof siguió los mismos pasos y dispuso que los empleados de esa administración que hubieran recibido al menos una dosis están en condiciones de ser convocados a realizar tareas presenciales, pasadas tres semanas desde el momento de la inmunización.

Cómo será la presencialidad plena en las escuelas

También, a partir del miércoles, se intensificará la presencialidad en las aulas de todo el país, luego de que el Consejo Federal de Educación aprobara esta semana cambios en los protocolos sanitarios que se encuentran vigentes.

"Tenemos la responsabilidad de garantizar el cuidado de la salud de toda la comunidad educativa. Hoy consideramos que se puede avanzar de manera segura y proponemos este paso porque contamos con el aval de las y los especialistas del campo sanitario y epidemiológico, luego de trece semanas de mejora de los indicadores", dijo esta semana el ministro de Educación, Nicolás Trotta.

En ese sentido, el funcionario explicó que los cambios "se aplicarán manteniendo y, en algunos casos, incrementando las medidas de cuidado ya que la pandemia aún no ha terminado".

Los protocolos aprobados por el Consejo Federal de Educación, donde se sientan todos los ministros de Educación del país, contemplan tres escenarios posibles:

Condición óptima: se trata de las escuelas que pueden asegurar la presencialidad completa manteniendo un distanciamiento físico de 1.5 m entre estudiantes, sin dejar de ventilar, asegurar el uso de mascarillas y la higiene de manos. Para mantener esta distancia es necesario aprovechar al máximo el mobiliario escolar en toda su extensión.

Condición admisible: aplica para los establecimientos que no puedan asegurar el distanciamiento de 1.5 m. Para lograr una presencialidad plena, se tomará una distancia física de 0.90 m entre estudiantes en las aulas, manteniendo el requerimiento de 2 m en los espacios comunes y con el cuerpo docente. En este caso, aumenta el requisito de ventilación, no solamente manteniendo abiertas ventanas y puertas sino incrementando el tiempo de ventilación entre clases.

Excepciones: las escuelas que no puedan mantener un distanciamiento físico de 0.90 m entre estudiantes, podrán mantener una distancia menor; y las excepciones podrán aplicarse en contextos de bajo riesgo epidemiológico y con adecuada cobertura de vacunación en la población general. No obstante, estas excepciones deberán ser acompañadas de las siguientes medidas obligatorias: mantener e incrementar el resto de las medidas implementadas; la distancia entre estudiantes y docentes, así como entre docentes, se deberá mantener en 2 metros; el distanciamiento en zonas de uso común, incluyendo comedores, no podrá ser menos a los 2 metros y agregar estrategias preventivas adicionales.

Cómo será el regreso del público a los estadios

También, para el mes de setiembre se espera también una prueba piloto para el retorno del público a los estadios de fútbol, la cual se hará en el encuentro que disputarán la selección Argentina y la de Bolivia el 9 de septiembre por las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial de Qatar 2022, en el estadio Monumental.

Los ministros de Salud, Carla Vizzotti; y de Turismo y Deportes, Matías Lammens, mantuvieron esta semana reuniones con representantes de la Asociación del Fútbol Argentinoa (AFA) -como su jefe médico, Donato Villani- para avanzar en el protocolo que se utilizará en la cancha y las medidas de seguridad para el regreso del público.

Una de las mayores preocupaciones de las autoridades nacionales se centra en la necesidad de que la entrada del público al estadio de River Plate sea fluido y no se generen trabas por los controles sanitarios.

En virtud del cupo de espectadores autorizados para el partido con Bolivia se espera que asistan al Monumental entre 20 y 23 mil personas, lo que exige un operativo de control eficiente para evitar concentraciones.

"Será una prueba no solamente para que vuelva el fútbol, sino también para el resto de las disciplinas deportivas. Creemos que es un evento que amerita esta excepcionalidad en términos de lo que significa y nos permite hacer una evaluación de cómo se van a implementar los protocolos", adelantó Lammens esta semana.