La Justicia Comercial decretó hoy la quiebra del Correo Argentino SA, de propiedad de la familia de Mauricio Macri, luego de que fuera rechazada una nueva propuesta de la empresa postal que no satisface el interés del Estado Nacional, principal acreedor de la compañía.
En su fallo, la jueza recordó que de las 6 firmas que se presentaron al salvataje solo el propio Correo Argentino S.A. "mantuvo el interés de seguir con el trámite", y párrafos más adelante explicó que la oferta realizada no alcanzó a los acreedores necesarios como para prosperar.
Cirulli señaló en su fallo de 44 hojas que la oferta realizada por la concursada solo representaba el 100% de la deuda a los ojos de la propia empresa pero que no abarcaba el valor actual de la misma.
Además, la magistrada hizo referencia a la supuesta conformidad que la empresa deudora atribuyó a los acreedores de Categoría C, que habían prestado acuerdo a ofertas realizadas hace casi 20 años, en otra instancia del proceso concursal.
"Ante esa situación, no podría razonablemente suponerse que aquellos acreedores Categoría C -antes aquiescentes- aceptarían ahora la llamada mejora de propuesta, tratándose de créditos devengados hace dos décadas", sostuvo la jueza.
En tanto, la magistrada agregó que no encuentra “mérito para calificar al Estado Nacional como acreedor ´hostil´ tal como se irá viendo", en alusión a las acusaciones que había lanzado la empresa de los Macri contra el Gobierno, y más precisamente contra la Procuración General del Tesoro, en el expediente del concurso.
"Si la deudora puede ofrecer una propuesta mejor, pero la retacea hasta el último momento posible, mal podría calificar de ´hostil´ al acreedor que decide no aceptarla por hallarla insuficiente", sostuvo la jueza.