Además, gran parte del dinero, poco más del 46%, fue para la compra de alimentos para asistir a familias que lo requirieron al no poder salir a trabajar.
En 2020, la ciudad de Ramallo se declaró en Emergencia Administrativa, Económica y Financiera, por lo cual los funcionarios municipales aceptaron destinar un porcentaje de su sueldo para algunas de las acciones más prioritarias. Pasado un año, el intendente Gustavo Perié informó que en total se juntó un monto de $ 3.473.865,22.
Ese dinero se destinó a diferentes áreas todas vinculadas a atravesar la difícil situación sanitaria y económica como consecuencia de la pandemia de coronavirus. Gran parte del dinero, poco más del 46%, fue para la compra de alimentos para asistir a familias que lo requirieron al no poder salir a trabajar.
Otro tanto fue destinado para agilizar acciones vinculadas con la salud: la obra en la sala del tomógrafo ($662.727,97), compra de elementos de bioseguridad para el personal del Hospital José María Gomendio ($ 325.306,18), aporte para la compra de equipamiento para el nosocomio complementario al subsidio “Municipios de pie” ($ 280.950), panel de terapia intermedia ($ 240.000).
Pero si lugar a dudas una de las acciones que más orgullo le generó a la comunidad fue el arreglo de la ambulancia afectada a la Unidad Sanitaria de Pérez Millán, luego de estar 8 meses parada. El dinero aportado por los funcionarios del gabinete para este trabajo fue de $ 49.655.