7 septiembre 2024

EL INSOMNIO, UNA CARGA MÁS DE LA CUARENTENA


Estar encerrados las 24 horas del día, durante tantas semanas, también puede pasar factura a nivel psicológico. Aunque se trata de una medida imprescindible para afrontar la pandemia y está salvando miles de vidas, también resulta obvio que puede producir efectos negativos sobre la población.



 

Martes 28 de abril de 2020.

La obligación de confinamiento que debe cumplir todo el país, desde que se decretó el estado de alarma por la crisis sanitaria del coronavirus, no solo afecta a la libertad de movimiento. Estar encerrados las 24 horas del día, durante tantas semanas, también puede pasar factura a nivel psicológico. Aunque se trata de una medida imprescindible para afrontar la pandemia y está salvando miles de vidas, también resulta obvio que puede producir efectos negativos sobre la población.

En tanto, este fin de semana el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, publicó el mapa de los distritos en los que se podrá salir una hora todos los días. Cada distrito puede modificar su situación con el correr de las horas y cada municipio, además, comunicará a sus ciudadanos el protocolo vigente para esta actividad.
Situación excepcional
El psicólogo Andrés Pereyra abordó esta situación, sobre si es conveniente o no permitir un paseo y manifestó que “estamos viviendo una situación excepcional y la creatividad debe estar a la orden del día. Pero que hay efectos del aislamiento en las personas a nivel psicológico, es concreto y real. Si el aislamiento se extiende, estos efectos van a ser cada vez más graves. No en vano, el castigo cuando se comete un delito es el encierro, lo que genera una sintomatología muy fuerte a nivel mental”.

“Estamos trabajando con videollamadas y vemos que es complicado, porque no logramos la privacidad suficiente para trabajar. Hay gente que no quiere hacerla y se retrae aún más. El síntoma más característico es el insomnio, la alteración del sueño, está despierto hasta altas horas de la noche y duerme de día, algo muy complejo para la mente y para el cuerpo. Por eso lo recomendable es que, más allá de que no podamos salir a la calle ni tener contacto con los seres queridos, es bueno mantener una rutina y crear hábitos o tareas dentro de la casa”, destacó.

Cambio de hábitos
Sobre el cambio de sueño, del día por la noche, sin rutina fija, Pereyra determinó que “la gente se acuesta de madrugada y a las tres o cuatro horas se despierta y ya no vuelve a dormirse, lo que genera más malestar y nerviosismo. Entonces, si las autoridades, teniendo en cuenta lo excepcional de la situación, pueden lograr que la salida sea pautada, sería bueno, más en ciudades como la nuestra donde el control puede llevarse a cabo. En Junín, la gente está cumpliendo con las medidas, se ve en la calle, en los negocios, y creo que podría habilitarse la caminata individual en espacios públicos, en determinado horario. Por supuesto que todo depende también de la buena fe y voluntad de las personas”.

Los más chiquitos
En tanto, sobre los más chicos, destacaron que “la situación es más compleja porque para salir depende de un adulto. Si tenes varios hijos no pueden salir todos juntos porque es factor de contagio, pero es algo que podría ordenarse. Junín no tiene circulación del virus a nivel comunitario y la población tiene menos de 500.000 habitantes y se pueden hacer los controles. El proceso viene para largo, y el gobierno lo va extendiendo cada 15 días”.

Fuente: La Verdad de Junín.