Con apoyo del massismo y el PJ "dialoguista", la Gobernadora logró el apoyo necesario para aprobar el proyecto que contempla gastos por $ 929.000 millones de pesos, un déficit de $ 40.000 millones y pedidos de endeudamiento por $ 68.000 millones.
Martes 4 de diciembre de 2019.
La legislatura bonaerense se aprestaba a aprobó esta madrugada el Presupuesto y la Ley Impositiva 2019, y para lograrlo el Ejecutivo absorbió la totalidad de los $ 13.000 millones en subsidios que en el proyecto original pretendía transferirles a las comunas, además de concederle a Sergio Massa la creación de una comisión para evaluar el desdoblamiento de las elecciones municipales.
Los proyectos girados a principios de noviembre por la gobernadora María Eugenia Vidal comenzaron a tratarse pasadas las 21 horas de este lunes, luego de una larga jornada de negociaciones con el peronismo y el Frente Renovador, que introdujeron una batería de modificaciones a la iniciativa oficial a cambio de un apoyo coordinado que incluyó al kirchnerismo, que pese a su voto negativo acompañó y avaló las conversaciones de los intendentes "dialoguistas".
Los principales cambios, como viene informando DIB, giran en torno a las cuentas municipales: la Provincia absorbió la totalidad de los $ 13.000 millones en subsidios a los servicios públicos que había transferido a las comunas (entre transporte público, Tarifa Social Eléctrica y la tasa de Ceamse), eliminó por completo el tope al aumento de tasas locales (en el proyecto oficial era del 38%) y restituyó el reparto del Fondo Educativo a los niveles de este año: los distritos del Conurbano deberán gastar el 50% obligatoriamente en obras edilicias, mientras que las del interior, el 40%.
Para estas modificaciones fue clave el oficio de los intendentes del PJ bonaerense, con Martín Insaurralde (Lomas de Zamora) a la cabeza, que negoció con el jefe de Gabinete de Vidal, Federico Salvai, el resguardo de las cuentas municipales. Los jefes comunales se llevaron también un compromiso para financiar obras ya incorporadas en otros presupuestos, y lograron introducir en el proyecto la creación de un régimen especial de ayuda financiera destinado a "financiar total o parcialmente obras municipales".
En tanto, el oficialismo también cerró el apoyo del Frente Renovador, en una negociación en la que intervinieron directamente Vidal y Sergio Massa y que derivó en la creación de una comisión bicameral para analizar la posibilidad de desdoblar las elecciones municipales.
Apoyos y rechazos
El proyecto tuvo como dato novedoso la división de los permisos de endeudamiento de la Ley de Presupuesto. El inédito cambio, que generó amplios debates jurídicos al interior de Cambiemos, fue solicitado por el massismo, que buscaba de esa forma darle al Ejecutivo la mayoría especial (dos tercios de los votos) necesaria para aprobar la toma de deuda, sin tener que aprobar con los números del Presupuesto.
De hecho, el Frente Renovador adelantó que en ambas cámaras votaría a favor del endeudamiento y la Ley Impositiva y en contra del Presupuesto, aunque se esperaban algunas disidencias internas, como la de Pablo Garate, un legislador que en los últimos meses se mostró alejado de la conducción de la fuerza.
En tanto, el peronismo inauguró por su parte una también inédita estrategia de negociación: los intendentes "dialoguistas" encabezaron las conversaciones con el Gobierno y votaron en el mismo sentido que el Frente Renovador (apoyo a la deuda y rechazo al Presupuesto), mientras que el kirchnerismo, que votó negativamente los tres expedientes, avaló e incluso acompañó la movida. "Hubo un acuerdo marco político que permitió la disidencia interna sin que se generen roces", señalaron a esta agencia fuentes del espacio.
Números
El Presupuesto 2019 contempla gastos por $ 929.000 millones de pesos, un déficit de $ 40.000 millones y pedidos de endeudamiento por $ 68.000 millones. En tanto, las cámaras de Diputados y Senadores aprobaban esta noche sus propios presupuestos, y al igual que en el ejercicio anterior se estableció una rebaja respecto del año en curso: esta vez pasó del 1,2 al 0,9% del total de gastos aprobados en la Ley de Leyes.