Sábado 24 de marzo de 2018.
Tres nuevejulienses subieron en moto al Volcán Corona del Inca, en la Provincia de La Rioja. Ascendieron más de 5.500 metros de altura.
Hace una semana, los nuevejulienses Fabio Villarreal, Helvio Galvani y Helvio Galvani (H), se aventuraron en una travesía inolvidable hacia el Volcán Corona del Inca, ubicado en el oeste de la provincia de La Rioja.
“El viaje fue espectacular! Primero fuimos en camioneta con las motos en un tráiler hasta Alto Jahuel, un pueblito de 150 habitantes, en el medio de inmensas montañas petrificadas por la lava del volcán”, cuenta Fabio con mucha emoción. “Allá nos encontramos con quince personas más que nos esperaron en la Posada Los Mudaderos para comenzar la expedición, todos en moto.”
La Corona del Inca es el cráter de un volcán inactivo que se encuentra a más de 5.500 metros de altura. Es el segundo pico más alto de Latinoamérica, después del Aconcagua. Desde Alto Jahuel hasta la cima del volcán hay 40 km de camino de cornisa, donde hay que atravesar desde piedras enormes al borde del precipicio hasta planicies de arena muy densa. Ese fue el trayecto que realizaron los dieciocho pilotos en sus motos.
“Unas semanas antes de comenzar el viaje, contratamos un guía que fue explicándonos cómo debíamos prepararnos físicamente para afrontar esa altura. Debíamos comer muy liviano y tomar mucho líquido, estar bien hidratados, porque la falta de oxígeno produce un mareo constante que sin preparación no se puede soportar”, explica Helvio padre. “El guía nos acompañó en una camioneta equipada con tubos de oxígeno y todo lo necesario para cuidarnos, eso nos decían todo el tiempo nosotros estamos para cuidarlos, no solo para mostrar el paisaje”.
“El paisaje es increíble! Montañas que exhibían todas sus capas y hasta un lago en medio del cráter formado por agua del deshielo que ocurre a esa altura. Pero lo mejor es la gente, tan humilde y cordial. Todos se preocupaban por cuidarnos, para que disfrutemos de la travesía”, cuenta Helvio (H).
La provincia de La Rioja posee diversas formas de relieve que brindan las mejores condiciones para realizar deportes extremos como el enduro y el parapente. Por eso, se convirtió en un punto de encuentro de deportistas de todo el mundo, ya sea para entrenarse o realizar este tipo de expediciones con guías experimentados.