Jueves 4 de agosto de 2016.
El Gobierno está cerca de cerrar un acuerdo con la cadena porcina para promover el consumo de este producto en el mercado interno y reducir las importaciones de carne de cerdo, en especial de Brasil. Según un informe de IES Consultores, en el primer cuatrimestre del año el consumo por habitante de cerdo alcanzó los 12,4 kilos por habitante, un 17% más que en igual período de 2015. Además, en el primer cuatrimestre la faena porcina fue de 210.000 toneladas, con un crecimiento respecto del año pasado del 8 por ciento.
En este contexto, los Ministerios de Agroindustria y Producción están negociando con la cadena porcina un sistema para incentivar más el consumo y que esta mejora llegue, además, en precio a los productores porcinos. El Gobierno también quiere que suba el consumo de cerdo para amortiguar la caída del consumo de carne vacuna, que retrocedió un 7,7% en el primer semestre y podría hacerlo más por la retención de animales que hay en el campo apostando a incrementar el rodeo en los próximos años.
En el Gobierno sostienen que la carne de vaca está a $ 100, en el promedio de cortes al público, mientras que la de cerdo ronda los $ 70/80. Sin embargo, indican que la carne de cerdo rinde menos que la de vaca, lo cual es una desventaja en cuanto a la preferencia del consumidor, pero abaratándose más podría crecer su consumo a un mayor nivel.
"Probablemente se resienta más el consumo de carne vacuna pero como no queremos que baje el consumo total de carnes, que ronda los 110 kilos (entre vaca, cerdo y pollo), queremos con la cadena que se consuma más cerdo", expresó una fuente oficial. En el Gobierno están preocupados para que el productor porcino mejore su precio. En rigor, los funcionarios observan que mientras al productor de cerdo le pagan $ 15 el kilo, el productor de carne vacuna cobra en torno de $ 30 el kilo.
Otro punto del acuerdo con la cadena porcina es la importación. En este sentido, los funcionarios apuestan a reducirla. Entre enero y junio ingresaron desde el exterior, en su mayoría de Brasil, 9833 toneladas, cifra que duplica el mismo período del año pasado, según fuentes del sector privado.
"En chacinados las empresas solo van a traer lo que realmente necesiten. Hay un 5% de importación (sobre el total) que se necesita para chacinados", contó una fuente oficial al cierre de la negociación.
Para el resto de la importación, esto es cortes de cerdo, "la importación va a ir bajando paulatinamente", señaló la fuente oficial. Fuentes empresarias indicaron que esto se hará mediante cupos entre privados.