Los vecinos de Salazar ven los primeros movimientos de la vuelta de las obras en la Ruta del Cereal.
La "ruta del cereal" une a los pueblos de Mones Cazón (Pehuajó), Salazar (Daireaux), Girodias (Trenque Lauquen) y Trongé y Garré (Guaminí). De los 96 kilómetros de esa ruta, sólo están con pavimento 26, un trabajo que se concluyó en 1990, entre la ruta 86 y Mones Cazón. El resto se iba a hacer por etapas. El primer tramo por pavimentar, unos 20 kilómetros, es el que une Mones Cazón con Salazar.
UNA OBRA DEMORADA
En agosto de 2008, pocas semanas después de que terminara el conflicto por la 125, el entonces gobernador bonaerense, Daniel Scioli, visitó la zona, para anunciar el comienzo de las obras de pavimentación. "Para mí, no hay pueblos chicos, son todos grandes y gobernamos para todos, como corresponde", dijo entonces. Poco tiempo después comenzaron los trabajos. Se hizo la alcantarilla, el alteo y el abovedado. En 2012 se licitó la obra final de pavimentación y se adjudicó el trabajo al consorcio de empresas constructoras Fontana Nicastro-Vialagro. Según las previsiones, el pavimentado debía estar concluido en un año. Sin embargo, según los integrantes de la Comisión de Vecinos de Daireaux, el gobierno bonaerense comenzó a demorar los pagos de la obra, presupuestada en $ 72 millones, y el trabajo se paralizó. "Nos dijeron que la obra está neutralizada", explica Héctor Holgado, integrante de la Comisión de Vecinos. Ese curioso neologismo cobró vida en marzo del 2015, cuando se retiró el obrador. El trabajo inconcluso se fue degradando por acción de la lluvia y el viento, denunció oportunamente Holgado.
