Jueves 7 de enero de 2016.
Michael Mosley averiguó cuándo es bueno -y cuándo no- recalentar un plato.
Es una buena forma de ahorrar y, al mismo tiempo, de no desperdiciar recursos. Recalentar la comida parece ser algo que todos hacemos, pero ¿cuándo puede resultar peligroso?
Luego de comidas suculentas, generalmente nos quedan porciones sobre la cocina que pareciera un crimen tirar a la basura. Y servir algunas de ellas por segunda vez, efectivamente, puede ser hasta saludable.
Por otro lado, ninguno de nosotros quiere arriesgarse a una intoxicación. Si te ha pasado, ya sabrás cuán desagradable puede ser la experiencia: vómitos, diarrea y dolor estomacal.
Entonces, ¿cuáles son las reglas para que recalentar la comida no sea un riesgo?
La intoxicación por comida generalmente es causada por una bacteria que contaminó tus alimentos. El gran culpable no es tan conocido como diseminado. Se llama Campylobacteria y, según la Agencia de Estándares Alimentarios de Reino Unido (FSA), está presente en el 65% de los pollos en venta en Reino Unido. Incluso, un estudio reciente la mostró en el 6% de los envases de pollo que uno toma en el supermercado, por fuera.
La Campylobacteria puede sobrevivir por un par de horas en la superficie de la cocina, así que se esparce fácil. Y te puede enfermar con sólo una pequeña dosis.
Mientras necesitarías decenas de miles de la bacteria de la salmonela en tu cuerpo para enfermarte, de la Campylobacteria sólo te hacen falta unas 500.
Es por culpa de esta bacteria, que se esparce tan fácil, que no es buena idea lavar el pollo antes de cocinarlo. Mucho mejor ponerlo directamente al horno luego de sazonarlo y lavarte inmediatamente las manos tras manipularlo.
No es malo usar el microondas, siempre y cuando nos preocupemos de que la comida se caliente pareja y no queden pedazos fríos.
La clave para matar la bacteria es el calor. Por eso es tan importante la cocción, especialmente del pollo que, dada su textura, permite que la bacteria esté presente a través de toda su carne.
Entonces, pollo cocinado y listo. Cena servida y exitosa. Pero, ¿qué hacer con lo que sobró?
Primero que todo, dejarlo enfriar antes de meterlo al refrigerador. Si pones comida caliente en el refrigerador lo único que lograrás es subir la temperatura de este, volviéndolo una perfecta incubadora de bichos, nada bueno para la comida que ya tienes dentro.
Recientemente traté de poner los restos de un pollo en mi refrigerador cuando todavía estaba tibio y la temperatura subió cerca de cinco grados.
Lo que hay que hacer es cubrir lo que quedó de comida, dejarla enfriar a temperatura ambiente por no más de cuatro horas y sólo entonces ponerla en el refrigerador.
¿Cuántas veces recalentarla?
Hasta las pastas pueden contaminarse si no se recalientan apropiadamente.
Según la FSA lo recomendable es recalentar la comida sólo una vez, aunque igual se puede hacer varias, mientras lo hagas de manera correcta. Pero probablemente irá perdiendo sabor.
¿Cuándo hay que tener cuidado?
Comidas que puede ser peligroso recalentar, según la FSA
Carne cocida o comida que contenga carne, como guisos o lasaña
Salsas que contengan leche o crema
Pescados y mariscos
Arroz y pasta
Comida que contenga huevos, frutos secos u otras comidas ricas en proteínas.