Jueves 29 de octubre de 2015.
El Accidente Cerebrovascular afecta a 1 de cada 6 personas, mayoritariamente adultas, pero también a un porcentaje de jóvenes y niños.
Las enfermedades cerebrovasculares ocupan el segundo lugar como causa de muerte en Chile, después de las enfermedades cardíacas y la primera causa de invalidez en personas adultas mayores de 65 años.
El ACV puede ser isquémico 80% (cuando una arteria se ocluye) o hemorrágico 20% (cuando una arteria se rompe).
Mitos y realidades de los ACV
Mito: El ACV no es prevenible.
Realidad: El ACV es fácilmente prevenible.
Mito: El ACV no es tratable.
Realidad: El ACV es tratable en urgencias.
Mito: El ACV es enfermedad de ancianos.
Realidad: El ACV afecta niños, jóvenes, adultos jóvenes y adultos mayores.
Mito: El ACV se relaciona con el corazón.
Realidad: El ACV afecta gravemente al cerebro (“Brain Attack").
Mito: No hay recuperación después de un ACV.
Realidad: La Neurorehabilitación activa logra la mejoría de muchos o todos los síntomas del paciente.
¿Cómo reconocer un ACV?
Los síntomas del ataque cerebrovascular incluyen:
• Adormecimiento, entumecimiento, hormigueo, o debilidad en una mitad de la cara, brazo o pierna (especialmente en un lado del cuerpo) de comienzo súbito.
• Confusión, dificultad para hablar o entender el habla de otros de comienzo súbito.
• Dificultad con la visión en uno o ambos ojos de comienzo súbito.
• Súbita dificultad para caminar, mareo, pérdida del equilibrio o de la coordinación.
• Súbito dolor de cabeza severo o extremadamente severo, sin causa conocida.
TIA , AIT o “mini-ataque cerebral”
Algunas veces los síntomas pueden aparecer por un periodo muy breve (minutos solamente) pero luego desaparecen completamente, indicando posiblemente un ataque isquémico transitorio o AIT (también conocido como TIA por sus siglas en inglés). Evita ignorarlos, y acude inmediatamente a un Servicio de Urgencia, aunque estos síntomas sean breves, ya que los mismos indican un riesgo grave de ataque cerebrovascular y la posibilidad de un daño permanente.
¿Qué hacer si sospecho que tengo un ACV?
Un ataque cerebrovascular es una emergencia médica! Si tu o alguien a tu alrededor sufre cualquiera de los síntomas descritos, hay que acudir inmediatamente a un Servicio de Urgencia.
Cada minuto cuenta. Cuanto más tiempo duren los síntomas del ataque cerebral, mayor es el riesgo de daño cerebral. La atención médica inmediata puede salvar la vida de la persona afectada.
El plazo máximo para que estos pacientes reciban este tratamiento es de solamente 4.5 horas desde el inicio de los síntomas.
Una forma “casera” para orientarse mejor puede ser la siguiente:
Habla: ¿Dices cosas extrañas cuando HABLAS?
Brazo: ¿Eres incapaz de mantener tu BRAZO extendido por unos segundos?
Cara: ¿Tienes la mitad de la CARA débil o caída?
Prevenir un AC es más simple de lo que crees:
1. Controla tu presión arterial (PA)
2. Controla tu colesterol
3. Controla tu glicemia
4. Deja de fumar
5. Tome una o dos copas de vino tinto al día.
6. Deja el sedentarismo
7. Evalúa riesgos y beneficios del uso de anticonceptivos orales o terapia de sustitución hormonal, ya que aumentan el riesgo de eventos trombóticos en ciertas poblaciones de riesgo.