Lunes 20 de Julio de 2015.
La “caja de maternidad” nació en Finlandia hace 75 años, como una herramienta para reducir la mortalidad infantil.
En Cadena Nacional, Cristina Kirchner presentó el Plan Qunita, que se le entregará a todas las mamás que cuenten con la AUH (Asignación Universal por Hijo) por embarazo. “Hay un moisés que usamos por tradición familiar. No es solamente entregar una cuna que se puede armar, con su colchón, con dos bolsos, con pantuflas, con la mochilita... es una estrategia integral", explicó la mandataria.
Según dijo la Presidenta, el plan tiene un costo unitario de $ 7784 y, si bien ya hay 5000 planes para entregar “de forma inmediata”, el Estado había encargado 140.000 unidades por un costo total de $1.097.259.250,00, de acuerdo a la Decisión Administrativa 300/2015 publicada en el Boletín Oficial.
Pero el Plan Qunita no es nuevo. De hecho, tiene un antecedente europeo. Hace 75 años, Finlandia comenzó a implementar la “caja de maternidad”. Según señala la BBC, cuando una mujer está a punto de ser madre, el Estado le da la opción de elegir entre una reducción impositiva de €140 ó una caja con el ajuar para su futuro bebe. El 95 por ciento de las mujeres prefiere las cajas, dada la diferencia comparativa de costos. Dentro de la caja de cartón (que también puede servir como cuna durante los primeros meses de ida del niños) se puede encontrar un colchón, frazada, sábanas, bolsa de dormir; traje para la nieve, conjuntos tejidos, medias, guantes y sombreros; bata de baño, peine, cepillo de dientes, termómetro, cremas; y juguetes.
Esta tradición empezó en 1938. Al principio solo estaba disponible para las familias de bajos ingresos pero en 1949 decidieron ampliarla a todas las familias finlandesas -más allá de su poder adquisitivo- para garantizarle a todos los niños un “comienzo de vida equitativo”.
El plan surgió en un contexto económico desfavorable para el país nórdico. Finlandia contaba con una tasa de mortalidad de 65 muertos cada 1000 nacidos vivos. Como en el Plan Qunita, la caja de maternidad no solo implica regalos sino también obligaciones. Para poder conseguir una de estas cajas, las madres debían someterse a controles de salud. Esto tuvo un impacto fundamental en la reducción de la mortalidad infantil en el país europeo.
En esta parte del continente Uruguay también lanzó un plan similar en 2013. El Ministerio de Desarrollo Social uruguayo repartió un set de bienvenida que incluía alfombra, manta, vaso, plata, cuchara, juguetes y cuentos. A ese set se le agregó, el año pasado, una practicuna para los niños que viven en hogares hacinados.