19 marzo 2024

Generación Z: NUEVAS FORMAS DE AMAR


Jueves 28 de febrero de 2019.

El uso de las aplicaciones y redes sociales de no son una novedad a la hora de buscar pareja, pero el uso frecuente de estas tecnologías ha dado origen a una serie de terminos entre los más jovenes que explican determinadas situaciones.

Palabras como instagrandstanding, ghosting, orbiting o birdboxing pueden sonar graciosas en una primer instante pero el desconocimiento de sus significados puede dejarnos knock-out a la hora de relacionarnos. Estos términos generados por los usuarios nacidos entre 1995 y 2010, también conocidos como postmillenials se usan para identificar algunas actitudes digitales a la hora de hablar del amor.

Federico Volinsky, creador de la app BlindLove que revolucionó este mercado este año, sostiene que “estas palabras son modas que difícilmente sean estables. Lo que podemos ver en todas las personas que lo utilizan -incluso en la generación Z-, es ganas de armar un vínculo que trascienda y que genere momentos espontáneos de auténtica conexión, compartir con el otro.”

Pero qué significan y cuándo se aplican:

Instagrandstanding: identifica al usuario que buscando un acercamiento con otra persona comienza a realizar posteos con temas que  de su interes con el solo objetivo de llamar su atención. Por ejemplo si el pretendido gusta de frecuentar cervecerias el interesado subira fotos o posteos relacionados con ese tema.

Ghosting: algo similar a lo que años atrás se conocia como "nunca más me llamó", una de las partes corta todo tipo de contacto digital y desaparece en la net luego de haber tenido un intenso intercambio digital. Sigue siendo una de las formas más crueles de terminar una relación y es la palabra más temida del nuevo glosario.

Orbiting: muchas veces aparece luego de la anterior, aunque el contacto directo haya finalizado por parte de uno de los integrantes continúa poniendo me gusta en algunas publicaciones o da un retweet a un mensaje de la otra persona.

Birdboxing: aunque resulte llamativo esta palabra nace de la película Bird Boxing protagonizada por Sandra Bullo y hace referencia a aquel que parece hinoptizado por la otra parte y como si tuviera vendas en los ojos solo puede ver sus bondades de pareja sin ver la realidad de su match (relación).