28 marzo 2024

 Choferes debían llevar egresados, pero estaban drogados

Tres choferes dieron positivo de narcolemia y los padres de los egresados bloquearon la terminal de ómnibus de Rosario en signo de protesta.

 

 

Un grupo de alumnos egresados de primaria debían viajar esta madrugada desde la terminal de ómnibus de Rosario a Villa Carlos Paz, con motivo de festejar el fin del ciclo lectivo. Sin embargo, lo que debía ser una fiesta quedó opacado por el escándalo.

Es que cuando los dos choferes que debían transportarlos llegaron a la estación, fueron sometidos a un control de narcolemia en el que dieron positivo de drogas en sangre. A modo de protesta, los madres y padres decidieron bloquear la entrada de micros desde la madrugada hasta el mediodía.

Los estudiantes tenían previsto salir a las 4.30 de la madrugada, pero a las 9 no había llegado ningún conductor en condiciones. Más tarde, a eso de las diez de la mañana, llegó un tercer chofer que, insólitamente, tampoco aprobó la prueba.

Algunos choferes explicaron que muchos mastican “hojas de coca para poder estar alerta y despiertos”, una práctica cultural muy común en el norte de nuestro país.

En medio del caos de tránsito que se produjo y el consiguiente malestar de los pasajeros varados, el titular de la terminal Mariano Moreno, Hector Peiró, se ofreció a actuar como mediador entre la empresa de turismo, la firma de colectivos Costa Viaje a cargo del traslado del contingente escolar, y los padres indignados por la situación.

En ese momento, declaró ante la emisora local declaró Radio Dos: “estamos esperando un chofer que esté en condiciones”.

Peiró reveló que los padres pidieron el control de alcoholemia antes de la salida de los colectivos por seguridad en el traslado de los estudiantes de tres escuelas primarias rosarinas a Carlos Paz.

El funcionario reconoció que durante la madrugada el personal de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) no tenía los elementos para hacer los controles que pedían los padres y pidieron que intervenga el municipio.

Es decir que, de no haber sido por el accionar de las familias, el viaje podría haber constituido una verdadera tragedia.