18 marzo 2024

Misa Crismal: "REDESCUBRIR LA IGLESIA"

Sábado 24 de marzo de 2018.

El obispo diocesano, Mons. Aariel Torrado Mosconi presidió la misa crismal en la Iglesia Catedral de Nueve de Julio el jueves por la noche. Asistieron delegaciones de las parroquias de la diócesis y fue concelebrada por la casi totalidad del clero diocesano junto al obispo emérito Mons. Martín de Elizalde osb y el arzobispo Mons. Alfredo Zecca. En ella se bendijeron los santos Óleos, consagró el santo Crisma para los Sacramentos y los sacerdotes renovaron sus promesas.
En la homilía el prelado hizo un insistente llamado a redescubrir la Iglesia “como madre amorosa, a vivir en ella como familia en íntima comunión de amor, y a testimoniarlo entusiasta y gozosamente para que llegue a todos”. Asimismo la definió como misterio de cruz, amor y esperanza, ya que tiene su fundamento en la Pascua que vamos a celebrar.
Remitiéndose al legado del Cardenal Pironio, a los 20 años de su fallecimiento, profundizó sobre las “tres realidades de fe” que se celebran durante la misa crismal: La Iglesia de la Pascua, la caridad pastoral y la paternidad espiritual de los presbíteros y de la toda Iglesia.


“En la Pascua está la matriz de la Iglesia –subrayó el prelado-. Ella revive constantemente el misterio de la cruz cuando participa y se compadece de los sufrimientos de los hombres así como cuando es perseguida y da testimonio de fidelidad y amor en la santidad de sus hijos. Por eso es signo, motivo y aliento de la esperanza en épocas de incertidumbre, desaliento y violencia. En cada celebración eucarística encontramos la fuerza para llevar la cruz y ser testigos de la esperanza para cuantos nos rodean”.
En segundo lugar, se dirigió a los sacerdotes paraa que durante la renovación de sus promesas y, por ende, a la renovación de sus “conciencias de haber sido ungidos para santificar y bendecir a nuestro pueblo” a que no tengan “miedo de morir a sí mismos, de salir y donarse de todo corazón a los fieles a los cuales fueron enviados”.
Asimismo se refirió a la insustituible labor que tienen como padres espirituales que “engendran la fe en el corazón de los cristianos”. “Engendrar la fe” sigue siendo hoy una de las claves de la nueva evangelización… La Iglesia cumple con su misión cuando da a luz nuevos cristianos. Y los sacerdotes -obispos y presbíteros- somos padres en ella”.
Antes de la bendición final, el Pbro. Lic. Pablo Etchapareborda de la diócesis de Mar del Plata, quien ya había disertado horas antes ante el Clero diocesano, brindó un breve testimonio cordial sobre la figura del cardenal Pironio. Finalmente las delegaciones compartieron un ágape fraterno en el salón de la capilla Sagrado Corazón de Jesús.