Personal policial debió trasladarse a Ramón Hernández al 750 después de recepcionar un llamado que alertaba sobre la colocación de un artefacto explosivo en la chimenea de una vivienda. No se encontró ningún explosivo.
Sábado, 12 de enero de 2019
Cerca de la 1 de la madrugada de este sábado se registró un llamado por amenaza de bomba, que indudablemente arrojó resultado negativo. La sorpresa fue que se produjo en verano cuando las escuelas están en receso pero esta vez, el blanco no era un establecimiento educativo sino una casa particular.
Personal del Comando Patrullas junto con sus pares de la división explosivos concurrieron a una vivienda de calle Ramón Hernández pasando el 760, respondiendo al llamado del servicio de emergencias 911.
Los efectivos policiales procedieron a desalojar las viviendas cercanas y se realizó la inspección correspondientes en los mismos, arrojando -como se esperaba- resultado negativo. Paralelamente, la circulación vehicular y peatonal por el lugar fue interrumpida, siguiendo el protocolo establecido para estos casos.
Vale mencionar que la casa esta habitada por integrantes de la comunidad gitana, según informó el sitio de noticias en facebook juninhoy.
