Este miércoles 14 de febrero se celebra el Día de los Enamorados, o también conocido como San Valentín, quien fue un mártir que desafió al poder y que casaba jóvenes a escondidas, debido a que estaba prohibido.
A fines del siglo II, en el Imperio Romano, el emperador Claudio II estableció que los miembros de su ejercito no debían casarse, porque según él rendían mejor cuando eran solteros.
San Valentín fue un médico que se hizo sacerdote y a él no le pareció una buena idea. Es por eso que decidió actuar contra la voluntad del gobernador y casaba parejas en secreto. De esta forma, su figura es relacionada con el amor.
A pesar de su buen accionar, esto no le salió barato. Según la BBC, el emperador se enteró y lo llamó para dar explicaciones. El santo lo justificó con su religión, pero no fue comprendido. En consecuencia, fue condenado a muerte y decapitado. Tras su muerte, pasó a integrar la lista de cristianos martirizados en el Imperio Romano.
Los restos mortales de San Valentín se encuentran en la Basílica de San Valentín den la ciudad italiana de Terni y todos los años cada 14 de febrero se realiza un acto de compromiso entre todas aquellas parejas que quieren unirse en matrimonio al año siguiente.
