26 abril 2024

ACTOS OFICIALES POR MALVINAS

 

Domingo 2 de abril de 2017.

Al conmemorarse hoy el Día del Veterano y los Caídos en la Guerra de Malvinas, la Municipalidad de Nueve de Julio desarrolló los actos oficiales conmemorativos en las instalaciones de la EEST Nro.2 “Mercedes Vázquez de Labbé”, dado que las malas condiciones climáticas impidieron desarrollarlo de los mismos en el monolito que recuerda al soldado Francísquez, donde no obstante se procedió a la colocación de una ofrenda floral.

Tras la faz protocolar del acto, y los conceptos del ex combatiente Guillermo Cristóbal, se dirigió a los presentes el Intendente Municipal, Mariano Barroso, quien expresó: "Cada 2 de abril tenemos esos sentimientos encontrados, admiración y respeto para los combatientes, lamentaciones por las decisiones mal tomadas, tristeza por los caídos. Es una fecha particular, que pervive en la memoria colectiva con heridas que aun intentan cicatrizar.
Cada 2 de abril las miserias de la guerra dejan, en general, lugar a los actos heroicos, esas historias de hechos extraordinarios que mantienen viva la llama de todos los que quedaron en las islas.
Nutramonos entonces de esos actos de entrega absoluta, donde sin egoísmos, sin mezquindades, un grupo de hombres hizo lo que las circunstancias inevitables le presentaron.
Tomemos de ejemplo su coraje, su hombría de bien, y su entrega total a una causa que es y fue siempre de todos los argentinos.
Cada 2 de abril tenemos la responsabilidad como funcionarios y como ciudadanos de recordar a quienes tomaron en sus manos y en soledad esa causa de todos.
Porque si San Martín cruzó los andes para liberar Chile, tuvo a todo el pueblo de Mendoza inmerso en la epopeya; porque Güemes en Salta tuvo siempre a todos los salteños apoyando y colaborando, lo mismo Belgrano en Tucumán. Pero en Malvinas, en esas Islas heladas, un grupo de hombres era la patria, un solo grupo de hombres eran los que arriesgaban y los que ganaban o perdían.
Los errores cometidos ya no se pueden reparar, la locura de la guerra, la estupidez de la insensatez, las bravuconadas a 2.000 kilométros. Pero sí tenemos la obligación de recordarlas, de refrescar la memoria. Porque esa será la única manera de evitar que alguna vez, en algún tiempo, un grupo de argentinos quede a la buena de Dios y en total soledad defendiendo la soberanía mientras el resto sigue su vida con normalidad.
Por último quisiera recordar una de las tantas historias de grandeza que encierra la gesta de Malvinas, hoy en el día de los veteranos y los caídos en la guerra.
El soldado voluntario Julio Ruben Cao había cumplido el servicio militar en el año ´81 y era maestro de escuela cuando comenzaron a llamar a su clase, la ´61, pero a Julio no lo habían convocado pese a ser un soldado de reserva.
Cuenta su madre que le pidió a su hijo que no fuera a la guerra, al fin y al cabo tenía a su mujer embarazada y ejercía la profesión que le gustaba, la de maestro.
Pero Julio un día le dijo: “Mamá, están convocando a mi clase” la madre le rogó que no fuera al regimiento a lo que Julio le responde: “Mamá, ¿cómo me pedís que me esconda? ¿cómo les voy a hablar a mis alumnos de San Martín y de Belgrano, si cuando me tocó pelear, el maestro se escondió debajo de la cama?”
El 2 de abril Julio dio el discurso en su escuela por la recuperación de las Islas y partió a los pocos días hacia las Malvinas, dejando una carta para sus pequeños alumnos que me gustaría compartir.
A mis queridos alumnos de 3ro D:
No hemos tenido tiempo para despedirnos y eso me ha tenido preocupado muchas noches aquí en Malvinas donde me encuentro cumpliendo mi labor de soldado: Defender la Bandera.
Espero que ustedes no se preocupen mucho por mí porque muy pronto vamos a estar juntos nuevamente y vamos a cerrar los ojos y nos vamos a subir a nuestro inmenso Cóndor y le vamos a decir que nos lleve a todos al país de los cuentos que como ustedes saben queda muy cerca de las Malvinas.
Y ahora como el maestro conoce muy bien las islas no nos vamos a perder.
Chicos, quiero que sepan que a las noches cuando me acuesto cierro los ojos y veo cada una de sus caritas riendo y jugando: cuando me duermo sueño que estoy con ustedes.
Quiero que se pongan muy contentos porque su maestro es un soldado que los quiere y los extraña.
Ahora sólo le pido a Dios volver pronto con ustedes. Muchos cariños de su maestro que nunca se olvida de ustedes.
Afectuosamente JULIO.
El soldado Julio Rúben Cao cayó en combate el 14 de junio, el último día de la guerra donde los enfrentamientos fueron casi cuerpo a cuerpo en una lucha desesperada por sostener la ya inevitable caída de Puerto Argentino. Fue el día de mayores bajas en la guerra.
Señoras y señores, en honor de todos los combatientes y de quienes aún hoy yacen en el suelo de las islas orgullosos cantemos: “las Malvinas, argentinas, en dominio ya inmortal.”