19 abril 2024

ACOSO SEXUAL A TRAVES DE LAS REDES

Miércoles 15 de noviembre de 2017.

"Ma, me voy por una noche porque si no los matan". Amenazada, una nena de 13 años le dejó este mensaje a su familia.

“Ma, me tengo que ir, es tan sólo por una noche. Si no me voy, los matan, me amenazaron. Mañana vuelvo, los amo”. Ese fue el mensaje que una mujer de 47 años, mamá de una nena de 13, encontró escrito de puño y letra de su hija, en la ciudad de Centenario, Neuquén.

Cuando la encontraron, se enteró del calvario que vivió su hija, quien había sido víctima de grooming o acoso sexual a través de las redes sociales.

El miércoles pasado, la desesperación se apoderó de la mujer, que tras hallar la desgarradora carta de su hija, alrededor de las 19, salió corriendo a hacer la denuncia. “Era todo muy loco en ese momento. Un ratito antes había estado hablando con ella, estaba haciendo unas láminas para el colegio”, recordó la mamá de la víctima.

En un estado de nervios y llanto llegó al destacamento, donde la derivaron a la Comisaría Quinta. “No sabía para dónde ir. Con la nota en la mano me fui a la comisaría y estuve dos horas y media esperando que me tomaran la denuncia”, recalcó la mujer. “Estuve prácticamente presa ahí adentro, esperando, porque estaban muy ocupados”, sentenció la madre, frente a la impotencia de no poder ir a buscarla.

Pasadas las 21 llegó la noticia que tanto anhelaba: la nena apareció sana y salva. “Cuando me quiero ir de la comisaría me dicen que no, que me tenían que tomar la denuncia”, detalló la mujer.

Tuvo que esperar para abrazar a su hija y, cuando logró verla, descubrió que dos semanas antes la nena había recibido el primero de muchos llamados atroces. “Si no hacés lo que te decimos, vamos a matar a tu familia”, fue la amenaza de un hombre, el primer llamado, desde un número con característica de México.

Como la víctima se negó, volvieron a llamarla: “Tenés que bajar una aplicación (Waplog), porque la muerte de tu familia va ser más pronto de lo que pensás”.

“Ella baja la aplicación y cuando la abre, ve que son miles de personas, de todo el mundo. Después una cierta cantidad empiezan a acosarla con imágenes pornográficas y a escribirle”, manifestó la mamá. Además, la mujer indicó que constantemente recibía llamadas del mismo hombre, quien le decía que tenía que poner que estaba de acuerdo con lo que recibía, que se quería poner de novia.

El martes, un día antes del hecho, la nena recibió el último llamado en el que le decían que tenía que abandonar su hogar. Bajo amenaza, caminó hasta un descampado en Centenario. Allí la esperaban dos hombres. “Uno, con tono colombiano, le preguntó si ella era la de la aplicación. Le pegaron una cachetada y le dijeron que no tenía que volver más a la casa si quería ver a su familia con vida”, relató la mujer. A pesar del miedo, la niña los empujó y salió corriendo, hasta que logró llegar a la casa de una amiga.

Ese fue el lapso que transcurrió desde que los padres de la nena encontraron su mensaje hasta que finalmente apareció en la casa de una amiga, tras escapar de sus agresores.

Hay otras 15 apps similares

El subcomisario Pedro Güento señaló que existen otras 15 aplicaciones de este tipo y, para prevenir, recomendó estar cerca de los chicos, ver con quiénes se contactan en las redes sociales y advertirles sobre los riesgos. En caso de descubrir esta situación, aconsejó no asustarse, no borrar nada, no seguir el juego y denunciar. Por su parte, la mamá de la víctima afirmó que su intención es generar conciencia. “Me reuní con el intendente el viernes para que se cree un lugar donde puedan contener a los chicos”, puntualizó.

 “Se comunicaron con la víctima unas 15 personas”

El subcomisario Pedro Güento de la División Delitos Sexuales de la Policía de Neuquén, quien investiga el caso, señaló la semana pasada que pudieron establecer que por privado se comunicaron con la niña unas 15 personas, todas mayores de edad. “Su mamá advirtió una situación con el teléfono, se lo sacó, radicó la denuncia y lo entregó”, indicó.

Luego, Güento explicó que la aplicación se descarga en el celular y posibilita que el adolescente ingrese a un megagrupo de Whatsapp en el que participan en este caso 35 mil personas.

“Entre los contactos hay números del extranjero y locales. Del grupo toman el número del menor y luego se contactan por privado y establecen el vínculo, que empieza como una amistad y luego sube de tono y pasa a ser de tenor sensual y luego sexual”, explicó, y aclaró que constituye el delito de grooming o acoso a través de las redes.

 

Fuente: LMNeuquén